Los proyectos personales son buenos para nuestro crecimiento. Pero muchos de nostros tenemos dificultades para encontrar el tiempo para realizarlos. Entre el trabajo pagado, la familia, la vida social y la necesidad  humana de disfrutar de nuestro tiempo libre, reservar un poco de tiempo para trabajar en nuestros propios proyectos puede parecer un lujo, o una tarea que nunca se puede alcanzar.

01. Tómate un 20% de tiempo

De seguro muchos ya conocen la famosa política de «20% de tiempo» iniciada por Google. Originalmente, los ingenieros tuvieron la oportunidad de pasar un día a la semana trabajando en proyectos que no estaban necesariamente en sus descripciones de trabajo. Tomando este tiempo para desarrollar algo nuevo, o arreglando algo que podía ser mejor.

Esta política es responsable de Gmail y de una serie de desarrollos menos sexys pero aún muy importantes. En los últimos años, esta política se ha puesto en marcha en favor de métodos más centrados para la innovación a gran escala.

Tomar el 20% de tiempo y destinarlo a proyectos personales puede descubrir preguntas y respuestas que nunca pensaríamos hacernos.

Experimenta destinando un 20% de tu día ó semana a cualquier proyecto personal que tengas en mente. Ya sea de ilustración, branding, diseño, animación, o lo que sea en lo que quieras mejorar, aprender, o simplemente llevar a la realidad. Poco a poco descubrirás con el tiempo que cada vez eres mejor.

02. Experimentación vs. proyectos importantes

Cuando estamos trabajando con el reloj del cliente, no se nos paga por experimentar. No se puede innovar de manera significativa bajo esas restricciones. Si queremos abrir nuevos caminos dentro de nosotros mismos, debemos dejar tiempo para hacerlo entre trabajos pagados.

No podemos saber qué proyectos serán destacados y cuáles no. Lo importante es que sigamos haciendo un esfuerzo.

Es más probable que al realizar tus proyectos estos te permitan crecer, explorar y encontrar recompensas inesperadas.

03. Una forma de encontrar tu camino

Los clientes nos contratan en función del trabajo que ya hemos producido. Si un ilustrador siempre ilustra escenas con animales, será contratado para trabajos que incluyan animales. Es lógico. Por lo general, también es bastante justo. Somos buenos diseñando las cosas que nos gusta diseñar, por lo que ser reconocido por esas cosas nos trae más de ese trabajo.

Los proyectos con clientes a veces toman una dirección inesperada que termina sin interesarnos , la única forma de romper ese ciclo es cambiar el guión y mostrarle al mundo qué más podemos hacer.

04. Es de tu propiedad

Con tanta discusión en los últimos años sobre los contratos de trabajo por el dinero que puede resultar de poseer una Propiedad Intelectual, este es a menudo uno de los principales motivadores para que muchos creativos hayan comenzado sus propios proyectos.

Es una buena estrategia a largo plazo para controlar los derechos a la mayor cantidad de trabajo que crees posible. Ya sea que obtengas ingresos futuros a través de licencias o derechos secundarios o que desarrolles algo que se convierta en una propiedad intelectual rentable, construir tu propia marca puede tener recompensas financieras además de artísticas.

05. Una salida para las frustraciones

Los clientes pueden ser frustrantes. De seguro que haz tenido experiencia con esos clientes que te aprueban algo y cuando llega la presentación final cambian de opinión . Cosas como esa pueden ser irritantes y afectar tus otros trabajos. Lo que hace que todo sea más estresante.

Realizar proyectos personales es una excelente manera de desahogarse (si no estás abrumado por el tiempo, por supuesto. Si lo estás, entonces son más motivadores) Y puedes hacerlo a tu manera sin compromiso.

Esto también se aplica a las frustraciones en la vida diaria. A veces todos necesitamos un lugar donde podamos tener el control de las cosas y los proyectos personales son salidas maravillosas para esto. No todos los proyectos personales deben ser desafiantes y ambiciosos. También es genial para nuestra salud mental divertirse, y la mayoría de las veces las cosas divertidas pueden resultar bastante buenas.

06. Mantiene tu mente flexible

Por otro lado, es fácil y cómodo dejar que los clientes te digan qué problemas resolver. A veces no sabemos lo que queremos diseñar y diseñar lo que otras personas quieren nos libera de ese peso. Permitir esa comodidad durante demasiado tiempo puede hacer que olvidemos quiénes somos como creativos.

Necesitamos seguir ejercitando la parte de nuestra mente que dice «¿no sería genial hacer este proyecto solo porque me gusta?» y «Quiero ver qué pasa si yo empiezo a explorar este camino con este proyecto».

Es saludable recordarnos de vez en cuando que hay una idea que desea ser explorada a pesar de que nadie nos esté pagando por hacerla.

Escucha historias sobre proyectos personales de creativos

Si quieres inspirarte aún más para comenzar a realizar tus proyectos personales, te invitamos a darte una vuelta por nuestro podcast en Spotify y Soundcloud. Y en especial al siguiente episodio: La Importancia de los Proyectos Personales con Oscar de 72 kilos

 

Escribe un comentario

Pin It